Sopa de ajo - PaCOcina - Cocina para novatos y cocinillas. Cocina para principiantes. Recetas de cocina. Gastronomía

Vaya al Contenido

Sopa de ajo

Sopa de ajo
Ingredientes:
- 100 gr. de pan asentado.
- 1 litro de caldo de pollo.
- 4 dientes de ajo.
- 1 cucharadita de pimentón.
- Sal.
- 4 huevos.



Elaboración:
En una cazuela ponemos un chorro de aceite de oliva virgen extra y ponemos a dorar los ajos laminados, a fuego tirando a fuerte, para dorarlos, no pocharlos que se pongan blandos; pero ojo, no dejarlos quemar. Cuando estén, echamos el pimentón, damos unas vueltas y añadimos el caldo (como siempre el caldo se puede hacer con agua y pastillas de caldo o comprarlo ya hecho; pero repito no es lo mismo) y dejamos que se vaya calentando.



   Por otro lado, en una cazuela ponemos agua a hervir, y cuando esto ocurra bajamos el fuego para que no burbujee. Cascamos un huevo y lo ponemos en el agua con mucho cuidado y dejamos que se haga, alrededor de tres minutos, procurando que el agua no llegue a hervir ni que se enfríe, para que no se desparrame. Hecho esto lo sacamos con cuidado y reservamos, y procedemos de igual manera con el resto de ellos. Bueno que os parece, ya hemos hecho huevos escalfados.



Y ahora os voy a contar otra forma de hacerlos, que quedan muy bonitos. Tenemos la cazuela con agua y la llevamos a ebullición, bajamos el fuego, pero puede seguir hirviendo. Cogemos un bol pequeño o un vaso y encima ponemos un poco de film trasparente para que haga la forma y cascamos el huevo y depositamos su contenido en el film. Lo cerramos dando vueltas y al agua hirviendo. Y dejamos que se haga, alrededor de tres minutos o menos. De esta forma no corre peligro el huevo de deshacerse por falta de temperatura o exceso de ella y además queda muy recogidito y bonito.



No hace falta decir que después de cocido tenemos que quitar el film trasparente con sumo cuidado para sacar el huevo, que nos quede entero, nos ayudamos con una cuchara. ¿Bueno a qué queda chulo? Teniendo nuestros huevos escalfados reservados, cortamos el pan, que es mejor del día antes y pan, pan; no baguettes que son bollería, en finas rebanadas con un cuchillo de sierra.



Y como con todo esto, nuestro caldo estará caliente ya, rectificamos de sal y le añadimos el pan que hemos cortado y dejamos cocer unos minutos, dos o tres, a fuego suave. Por eso es importante que el pan sea asentado que no se desmigaje. Ponemos nuestra sopa en los platos de servir y colocamos un huevo escalfado en cada plato. Y ya sólo queda lo más difícil... ¡COMERSELAS! ¡Je, je qué susto!



¡BUEN PROVECHO!
Regreso al contenido